
La teoría es que siempre hay una media naranja, una persona a la cual te unirá siempre un lazo tan invisible como indestructible, normalmente esas historias de amor, son amor frustrado, pues esa persona es tan igual a ti como distinta, y a vuestro alrededor navegaran barcos de envidia lanzando cañones de odio que os destruirán, que os separaran, que os harán correr en direcciones opuestas para despistarles, pero sabiendo que ese lazo no se rompe, lo que crea aun mas dolor que cien mil cañonazos directos al corazón. Bien, yo nunca creí en esas historias de disney, o de telenovela venezolana, nunca creí que nada fuese tan difícil, que el mundo fuese tan incómodamente cabrón, siempre fui una niña orgullosa y segura de si misma que creía poder enamorarse y desenamorarse racionalmente mil y una veces, cuando me conviniese. Hoy me he dado cuenta que no, si, hoy, así magicamente, fantásticamente, me he levantado de la cama y sin razón aparente he sentido algo que no me dejaba levantarme, era nuestro lazo. Como en una película pastelosa y cursi hoy me he dado cuenta de que nosotros somos protagonistas de una de estas historias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
I don't hate comments